lunes, 14 de octubre de 2013

LAS 7 PLAGAS EN LA INVESTIGACIÓN CIENTÍFICA DE LOS ESTUDIANTES UNIVERSITARIOS

En junio de este año, en la ciudad de Tingo María, se realizó el XIII Congreso Regional de Estudiantes de Economía. En la conferencia inaugural expuse: EL NUEVO ENFOQUE EN LA INVESTIGACIÓN CIENTÍFICA EN CIENCIAS SOCIALES. Ahí traté también sobre estas 7 plagas. De antemano, aclaro que en el país hay maestros excepcionales, en todas las universidades e instituciones educativas. Son pocos pero son. Pero estas plagas, que comenzaré a describir más adelante, creo que aún tienen predominio nacional.
1. EXCESIVA DEMORA EN ELABORACIÓN DE TESIS: PROBLEMA NACIONAL
El gran problema es la demora en las tesis de pregrado y posgrado. En los años 90, ante el alto porcentaje de egresados sin título profesional (Tesis era obligatoria), el Presidente Fujimori dio varias alternativas de titulación a la modalidad de tesis, como los Cursos de Actualización Profesional. Ahora que la Nueva Ley Universitaria (en discusión en el Congreso) plantea la obligatoriedad de tesis, y cuando el propio proceso de acreditación exige mayor porcentaje de titulación por tesis, el tema vuelve a estar en el centro del debate.
El problema del bajo nivel de titulación por tesis es nacional (Tesisfobia) y solo se da en nuestro país. Prácticamente todos los que salen a estudiar al extranjero vuelven con sus títulos o grados académicos. ¿Al extranjero van a estudiar solo genios? Claro que no. El asunto es que allá todos ponen el hombro, todos cooperan. Primero, el mismo estudiante sabe que si no se esmera, puede perder la beca; que si no se titula ahora, después será mucho más difícil. La misma universidad se compromete con cada alumno y le brinda todo su respaldo; del mismo modo, los profesores asesores y miembros del Jurado apoyan decididamente al tesista. Claro que ahí todos ganan, incluso incentivos económicos.
Asimismo, he revisado decenas de tesis doctorales de diferentes universidades del extranjero. He percibido que como toda obra humana tienen su errores, limitaciones, vacíos, etc., que éstos no son nada excepcionales. Pero son tesis que fueron observadas, corregidas, mejoradas y finalmente aprobadas en un tiempo prudencial. Se trata de trabajos colectivos donde todos suman y multiplican y no restan, ni dividen.
2. PERÚ: PAÍS ENFERMO DEL ALMA
Pero, acá en Perú, nos falta ponderación, equilibrio, para encarar con justeza y sobre todo con amor al prójimo, con vocación de maestro, este tema. Julio Cotler, un gran intelectual peruano, decía hace poco en una entrevista: “En el Perú nos gustan los extremismos”. Sí, nos gusta ser extremistas y negativos. Por eso, es usual los términos: La autoridad no hace nada, ese profesor no enseña nada, los alumnos no estudian nada, esa tesis no sirve, etc. Se cumple a cabalidad el dicho bíblico: “Es más fácil ver la paja en ojo ajeno, que ver la viga en el nuestro”.
Mi hipótesis es que el Perú es un país enfermo del alma, donde hay poco amor, muchas frustraciones, traumas no superados, energías negativas por doquier. Necesitamos amarnos primero para amar a los demás. Cuando haya verdadero amor al prójimo, cariño entre maestros y alumnos, habrá mayor confianza, mas cooperación, apoyo verdadero, orientación sincera, para que todos podamos unirnos hacia la graduación y titulación de nuestros alumnos. Es tiempo de cambios; tenemos que motivar, dinamizar, la elaboración de tesis por nuestros egresados, sí o sí. Y como dice un poema de César Vallejo: “Ya viene el día, ponte el alma”.
3. TEN CUIDADO DEL MEDIOCRE COMO MIEMBRO DE JURADO DE TESIS
El gran problema se encuentra en los Miembros de los Jurados de Tesis. La gran mayoría de profesores cambia radicalmente cuando es designado miembro de un Jurado de Tesis. De pronto el docente sencillo es como si se considerara erudito, sabio, más inteligente, muy riguroso y creo que hasta científico, para evaluar a una tesis; pero no para orientar, sino mayormente para bloquear, obstaculizar.
Y precisamente, los docentes menos capaces, menos solventes son los que hacen más problemas, ponen más trabas. Parece una especie de compensación a sus falencias, a sus limitaciones. Hay un dicho popular que dice: “Ten cuidado del negro con corbata, del ignorante con plata, del cholo con cargo”. Ahora hay que temerle mucho más al profesor mediocre como miembro de Jurado de Tesis. Hay que enfrentarlos, encararlos, arrinconarlos, a estos anticristos de la investigación en las universidades. Una buena medida es que el Jurado de Tesis evalúe, por ejemplo, los Proyectos de Tesis, de manera abierta, con masiva participación de alumnos y colegas.
4. LAS SIETE PLAGAS
1º. EL OLVIDADIZO: OLVIDA QUE FUE ALUMNO
El profesor también fue alumno; pero, parece que se olvida y a menudo. Hizo también su primera tesis, con serias limitaciones académicas. Ahora ha estudiado mucho, ha investigado, tiene experiencia; en suma, ha progresado. Eso es bueno. El problema es que quiere que el alumno le responda de igual a igual. Y, a veces, quiere que dé más que él. Le pide aportes científicos, intentando estrangularlo.
2º. EL VANIDOSO: SE COMPARA CON LOS DEMÁS
Es el profesor que vive comparándose con los demás. Con sus colegas docentes, incluso con los alumnos. Está siempre dispuesto a “demostrar” que sabe más. En el fondo de su corazón se siente menos, se da cuenta de que no lo valoran como quisiera. Olvida que para ser valorado hay que valorar, para ser respetado hay que respetar; que el deber del maestro es orientar, encaminar, siempre. Entonces, cree que “observando” más será más considerado.
3º. EL INSEGURO: ATACA POR MIEDO
Este es el profesor que se siente inseguro de su solvencia académica. Sabe que debe leer regularmente, que debe actualizarse siempre, pero no lo hace. Entonces, cree que la mejor defensa es el ataque. Es una especie de coartada a su bajo nivel académico. Sabotea las tesis de los alumnos. Le incomoda el progreso de los demás, especialmente de sus propios alumnos.
4º. EL INJUSTO: EXIGE SIN DAR
Como profesor es muy exigente pero enseña mal. Éste es el que desaprueba masivamente. Está convencido de que a más desaprobados, mejor docente es. Exige pero no da, no orienta en las tesis. Su investigación es muy defectuosa, pero exige perfección. Si le pides que te muestre su tesis se incomoda; te odia.
5º. EL FALTADO: QUIERE IMPRESIONAR
Este profesor es faltado, no sobrado. Le faltan neuronas, capacidad, talento. Para compensar quiere aparentar. Hace una serie de cosas para impresionar: En plena sesión de trabajo está “investigando” con su computador personal; su vida es vegetar, pero si le pides tiempo, siempre está “ocupado”. Busca impresionar atacando a sus colegas, ante los alumnos.
6º. EL NEGATIVO: VE SOLO LO MALO
Este profesor no se acepta como es. Tiene baja autoestima. Como no se acepta a sí mismo, no acepta al mundo. Como se cuestiona, cuestiona al mundo, particularmente a los sufridos tesistas. Nunca dice: “Tu tesis está bien, te felicito, pero mejora esta parte, de esta forma”. Ve solo lo malo en los demás; vive con odio.
7º. EL ESTÚPIDO: SE CREE DUEÑO DE LA VERDAD ABSOLUTA
Este es el peor de todos, esta es la plaga mayor. Se cree el dueño de la verdad absoluta. Ha leído algún libro, ha escuchado a algún profesor y cree que eso es absoluto. Por algo, Santo Tomás de Aquino decía: “Temed al hombre de un solo libro”, porque el hombre de un solo libro es cerrado, obtuso, absolutista, fundamentalista. Éste quiere que el mundo coincida con su manera de pensar. Olvida que en la Investigación Científica no hay nada absoluto, que lo más sagrado aquí es la libertad de pensamiento, de creatividad.